
Limpieza adecuada de tu bolsa de agua o bidón de ciclista
Una tarea aparentemente básica y muchas veces ignorada. Así sucede con la limpieza de nuestros contenedores de bebidas usados cuando vamos en bici.
Debes tener presente que incluso usando solo agua, si no limpiamos y desinfectamos cada cierto tiempo el bidón (botella o termo) o la bolsa de agua, proliferarán las bacterias y hongos. Cuando aumenta su presencia, pueden llegar a causarnos problemas gastrointestinales y estropear los propios envases prematuramente.
La limpieza adecuada del bidón es una tarea importante para el cuidado de la salud

Te recomendamos no utilizar el mismo bidón o caramañola para bebidas isotónicas y agua, además de que la desinfección de ambos recipientes debe ser distinta. Imagen: Brújula Bike.
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Utiliza cepillos que tengan longitudes y formas que te permitan acceder a todos los rincones del recipiente. Lo recomendable será tener mínimo dos cepillos: uno ancho y largo que quepa por la boquilla con el que se pueda limpiar el fondo del termo o bidón o acceder a todas las zonas de la bolsa y otro cepillo muy delgado para limpiar válvulas y tubos. También son necesarias las esponja o estropajos.
Limpieza de la bolsa de agua
Lo ideal es que sólo uses este recipiente para contener agua pura, esto debido a que su limpieza y desinfección son las más difíciles. Si usas bebidas isotónicas, estas contienen azucares donde se cultivan fácilmente bacterias y hongos que colonizarán la bolsa en pocas horas si se deja húmeda y con restos. En lo posible, opta por mezclar sales e isotónicos en un bidón, de lo contrario, será necesario hacer una limpieza profunda después de cada salida.
Para bolsas que contienen solo agua pura, basta con lavarlas con jabón para vajilla asegurándose de que la mezcla pase por el tubo y las boquillas, luego enjuagar bien, secar rápidamente y dejarlos ubicados de forma que el aire que circula seque la humedad por completo.
Para una limpieza profunda, adiciona agua, lava vajillas y frota bien por toda la bolsa con la ayuda del estropajo y del cepillo, expulsa un poco de esta agua con jabón por el tubo (esto enjabonará el interior) y luego desmóntalo de la bolsa para frotar su interior con el cepillo más estrecho que tengas o con un objeto delgado cubierto. Enjuaga bien y cuelga la bolsa permitiendo el paso de aire para un secado ligero. Limpia las dos partes de la válvula y lava con jabón, usando un cepillo fino, para acceder al interior. Limpia la tapa con jabón y no olvides retirar la junta de goma y limpiarla bien. Desinfecta todo cada dos o tres lavados profundos ya que el jabón no elimina totalmente las bacterias ni los hongos.
Limpieza del bidón
Si sólo lo usas para contener agua pura, usa agua y jabón, cerciórate de frotar todas las paredes y desarma por completo la tapa para limpiar todas las cavidades. Finalmente, enjuaga y ubica el bidón en un lugar donde el aire pueda acceder fácilmente y secar la humedad.
Si lo usas para contener mezclas isotónicas que contienen azúcar, lo mejor será hacer una limpieza profunda después de cada salida, además de una desinfección cada dos o tres días. Para la limpieza profunda, una vez vaciado el bidón, adiciona agua, jabón y frota todo el interior, incluido el fondo, con los utensilios ya mencionados. Para limpiar la tapa, es necesario desarmarla hasta donde sea posible, esto dependerá de la complejidad que esta tenga. Es muy importante separar la boquilla y acceder a todas las zonas con el escobillón más delgado para ello, de ser necesario, usa un objeto fino envuelto en trapo, recuerda, lo importante es llegar a todas las cavidades del recipiente. Volverás a montar la boquilla en la tapa sólo cuando esté completamente limpia y seca.
¿Cómo realizar la desinfección de ambos recipientes?
Si has escuchado decir que el bicarbonato de sodio, el vinagre o el limón sirven para lograr una buena desinfección de estos recipientes, la realidad es que ninguno lo hace por completo. La recomendación es usar productos destinados para este fin, por ejemplo, en el mercado se encuentran pastillas desinfectantes, ya sea para adicionarlas en el recipiente y disolver, o para preparar una solución en la que serán sumergidas las partes que se van a desinfectar, para lo cual debes tener todos los componentes desmontados teniendo la precaución de que permanezcan sumergidos, puedes poner algo de peso encima si es necesario, luego enjuaga bien con agua y déjalo secar.
Por último, cuando tu bidón o bolsa estén cuarteados, muy arañados o presenten manchas, es momento de estrenar.