
¿Cómo hacen los ciclistas para ir al baño en plena carrera sin perder tiempo?
Cuando surge una necesidad fisiológica en plena carrera los ciclistas solo tienen dos opciones: orinar encima de su bicicleta para no perder tiempo o marcar parada y buscar un sitio cercano para hacer sus necesidades.
Para muchos aficionados, algunas figuras del pelotón internacional se convierten en sus ‘héroes’ debido a su gran capacidad para dominar y liderar las grandes pruebas del World Tour. Sin embargo, los pedalistas profesionales, al igual que todos los espectadores, son humanos de carne y hueso y como humanos también sienten la necesidad de ir al baño en medio de una competencia.
Durante las etapas largas que superan las tres horas de recorrido es muy común que a varios integrantes del lote les de ganas de orinar o incluso defecar. Este asunto ha despertado la curiosidad de cientos de fanáticos al ciclismo que día tras día entran a Google para encontrar respuesta a la pregunta de cómo van al baño los ciclistas sin ceder minutos en el cronómetro.
Una de las curiosidades que más busca la gente en Google
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Pues bien, tal como lo han reconocido algunas estrellas del lote la respuesta es muy sencilla y solo hay dos opciones posibles: orinar encima de la bicicleta sin interrumpir el recorrido o marcar parada y buscar la cuneta al borde de la vía para hacer sus necesidades.
En la historia de las grandes vueltas las cámaras de la televisión internacional y los lentes de los celulares de los aficionados han capturado el momento exacto en el que algunos ciclistas se disponen a orinar durante una carrera.
Tal es el caso del corredor antioqueño Rigoberto Urán, quién en el año 2015 cuando corría para el equipo Etixx, publicó una fotografía en su cuenta oficial de Twitter en la que mostraba cómo hacía sus necesidades sobre la bici para no perder minutos durante la última etapa de la Volta a Cataluña.
Así publicó el escarabajo la curiosa imagen de su «miada»
Esto es trabajo en equipo, gracias pareceros. Hay me disculpan la miada tan larga… pic.twitter.com/GgvNczMti1
— Rigoberto Urán ЯU (@UranRigoberto) March 29, 2015
La estrategia, según el propio ‘Rigo’, consiste en pronunciar la palabra “Pisse” como señal de que está próximo a orinar. Los compañeros de escuadra interpretan el mensaje y se ubican al lado del corredor para sostenerlo y darle equilibrio mientras éste, con la mano contraria a la que sostiene el manillar, saca su pene del culotte para hacer sus necesidades sin bajarse de la bici.
Pero el colombiano no ha sido el único que se ha orinado en plena carrera. El esprínter alemán Marcel Kittel confirmó durante la París-Niza de 2016 que orinar en medio de las etapas con condiciones climáticas muy frías se convierte en una buena opción para darle calor al cuerpo por unos minutos. “En las carreras que están empapadas y heladas, me gusta orinarme a mí mismo. Me calienta por una fracción de segundo. Te calientas y no tienes que preocuparte”, dijo el corredor.
Sin embargo, hay algunos como Kittel que lo hacen por gusto y otros a los que la necesidad los sorprende en cuestión de segundos y los lleva a buscar un baño improvisado para depositar sus desechos fisiológicos. Tal es el caso del velocista Peter Sagan del Bora-Hansgrohe, quien sufrió un daño de estomago en pleno Giro de Italia de 2016 que lo obligó a interrumpir su recorrido y bajarse de la bicicleta durante la competencia para buscar un inodoro cercano.
El velocista parqueó su bici y pidió un retrete prestado
El campeón del mundo terminó metido en el baño de un autocaravana de un aficionado que estaba parqueado a un lado de la vía por donde pasaba la carrera. Finalmente, Sagan pudo hacer sus necesidades al interior del coche, volvió a ponerse su uniforme y se reintegró a la carrera.
Y es que esto también pasa en la máxima categoría del ciclismo UCI World Tour. Hay momentos en que las necesidades fisiológicas no son simplemente una orina sino daños estomacales o apretones abdominales que requieren que los ciclistas evacuen cuanto antes la materia fecal que tienen represada en su organismo.
Un hecho similar se registró tan solo un año después de que Sagan fuera victima de los retorcijones. En pleno Giro del centenario (2017), el líder parcial de la corsa rosa, Tom Dumoulin del Team Sunweb, estaba pedaleando indispuesto, al parecer con un problema digestivo.
Al lado de la valla se ve al líder del Giro de 2017 desnudo y concentrado en sus necesidades
Después de varias horas recorridas y ya sobre el penúltimo puerto de montaña de la etapa reina, el holandés del Sunweb no aguantó más y abandonó su bicicleta en plena competencia, se quitó la maglia rosa, el casco, se bajó el culotte y buscó una manga cercana a la orilla de la vía para poder defecar.
El solo hecho de haber parado a hacer sus necesidades le costó algunos minutos en la clasificación. Esa tarde, Dumoulin perdió 2’17” con el ‘Tiburón’ Nibali quien aprovechó el problema digestivo de su rival y ganó la fracción.
“Necesitaba con perdón cagar. No podía aguantar. En la bajada del Stelvio empecé a sentirlo y tuve que parar porque no podía. Decidí ir por ellos, luchar y luchar. Sigo con la maglia rosa pero decepcionado”, dijo el líder de la general en aquel momento.
Mira el video de la sorpresiva reacción del holandés
Tremendo, Dumoulin decide plantar un pino en plena 16ª etapa del @GirodItalia, buenísimo. pic.twitter.com/HiYAIyNHPd
— Manu Yagüe (@ManuYawin) May 23, 2017
Lo anterior demuestra que ningún ciclista está exento de sufrir una complicación estomacal en cualquier momento de una etapa oficial. Así como le sucedió a Sagan y a Dumoulin, hay ocasiones en que las necesidades fisiológicas son imposibles de dominar y es necesario interrumpir la marcha para solucionar el problema.
Cuando es una simple orina es más fácil de controlar y es por eso que muchos ciclistas deciden hacerlo en plena carrera para no regalarle tiempo a sus rivales. Hay otros, por su parte, que van con una buena ventaja y deciden parar a un costado de la carretera para hacer sus necesidades y luego retomar su ruta.
El último en hablar de este tema fue el vigente campeón del Tour de France Egan Bernal, quien en medio de una entrevista concedida al famoso comediante colombiano ‘Juanpis González’, reveló la forma en que un ciclista de alto rendimiento orina en medio de las largas carreras.
«Para lo que uno no se detiene es para orinar. Uno no se orina en el pantalón o en la pantaloneta. Toca tener práctica. Coger el manubrio con la mano izquierda y sacarlo con su mano dominante y empezar a orinar de manera disimulada”.
Algunos paran y otros como ‘Rigo’ prefieren pedir ayudar
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Egan además reconoció que, debido a la larga extensión de las etapas de carrera, que en su mayoría superan los 150 km, es necesario hacer esta operación hasta tres veces por día.
Así pues, estas son algunas de las estrategias que utilizan varios corredores para hacer sus necesidades en medio de las pruebas profesionales. Cómo lo mencionamos al inicio, hay dos caminos y el mejor sin duda es orinar encima de la bici para no perder minutos con los rivales. Sin embargo, cuando las necesidades fisiológicas son mayores a las de una simple orina es necesario tomar medidas como las de Sagan y Dumoulin.
Hay momentos de la fracción que lo amerita y el cuerpo lo va a agradecer. Como dirían los españoles “hay que salir miado y cagado”. Sin embargo, esto no quiere decir que en cualquier lugar de la vía se pueda hacer, ni más faltaba. El reglamento de la Unión Ciclística Internacional (UCI) es claro en este aspecto y fija una serie de lineamientos para orinar y defecar durante las competencias. La norma obliga a los ciclistas a pararse o a buscar un sitio adecuado que esté alejado de las miradas de los espectadores.