
Nairo y su intento de doblete Giro – Tour 2017
En crónicas previas al Tour de Francia 2017, y luego también, hemos expresado nuestra opinión respecto a lo que debe vivir un ciclista de alto rendimiento para llegar al culmen de su forma. También que ese punto máximo a veces no se consigue, o se consigue antes o después de lo deseado. Habría que decir también que programar dos picos de forma en la misma temporada es más sencillo si ambos están separados por al menos dos meses. Lo nuestro no es la preparación física, o la fisiología. Pero nos actualizamos continuamente sobre estos temas, estudiamos a los que saben y tratamos de sacar nuestras conclusiones.
Es posible la victoria en giro y tour el mismo año…?
Es así que nos parecía que Nairo había preparado a conciencia su Giro de Italia, para luego encadenar el Tour un mes después. Cumplió en el Giro, donde la victoria pasó por un escollo que casi nadie tenía en cuenta seriamente: Tom Domoulin. A Nairo le sobró el imprevisto holandés, y también la cantidad de kilómetros contrarreloj de la edición de este año de la corsa rossa. La duda que planteamos desde estas páginas era la de ver si la recuperación sería la necesaria para el Tour, donde la intensidad diaria está un punto más arriba que en otras carreras. Cualquier persona que practique ciclismo sabe que cuando los compañeros van apenas algo más rápido que lo que nuestra condición nos permite, flaqueamos y no podemos seguir el ritmo. Ni que hablar si eso sucede en la montaña. Esto mismo ocurre en la alta competición.
Un error de apreciación.
Con los hechos a la vista quedan dos cosas claras, o mejor dicho tres. La primera es que creemos que Nairo y su gente no valoraron la cantidad de kilómetros contrarreloj del giro ni la estratégica ubicación de estos en el desarrollo de la competencia. Allí estuvo un especialista en la lucha contra el crono como Domoulin, que además llegó con una impecable forma para afrontar la montaña. Y ganó.
La segunda cuestión es que en el ciclismo actual encadenar giro y tour es extremadamente complicado, no solo para Nairo, sino para cualquier ciclista actual de élite. Contador puede dar fe de ello, ya le paso esto mismo en 2015 a pesar de tener siete grandes vueltas ganadas. Por caso, Froome lo ha intentado alguna vez…? Los cuerpos de estos hombres son llevados tan al límite en la preparación, que ante el mínimo inconveniente acusan el golpe. Puede ser un resfriado, una gripa, alguna alergia…
La tercera cuestión que queremos dejar clara es que hoy los allegados de Nairo seguramente deben estar más preocupados por su estado anímico que por el físico. Lo segundo con descanso se cura, lo primero puede ser más complicado. Desde su irrupción en la alta competencia el de Tunja ha ido siempre a más, respondiendo a las exigencias. Con algún altibajo, es cierto, eso le sucede a todos, pero siempre estando a la altura de las grandes citas. Lo de este tour lamentablemente no es bueno, y esperemos que la secuela anímica pase pronto. Por lo demás, corresponde decir que Nairo es un crack, que además solo tiene veintisiete años, y que los talentos con que fue bendecido al nacer para practicar el ciclismo de alto rendimiento siguen estando, no se evaporaron, son parte de su genética. Ha sido un error de apreciación para intentar una hazaña, era lógico que no saliera bien, aunque sus fanáticos estaban tan ilusionados como el.
El año próximo volverá, y será nuevamente protagonista.
Hoy habló en conferencia de prensa en el segundo día de descanso.