El Tour de Trump: «Será mejor que el Tour de Francia»
¿Qué podemos aprender de la malograda carrera de Donald Trump?
Es cierto que este personaje nos viene a la cabeza hoy y no precisamente por la carrera de ciclismo. Pero dejemos la política a un lado y aprovechemos que él está «de moda» para hablar de lo que se esperaba que fuera El Tour de Trump.
Este tour solo corrió en dos ediciones, la de 1989 y 1990, y nunca llegó a ser lo que se esperaba, llegar a las ambiciones del Grand Tour.
En el año en que empezó esta carrera en Albany, la cantidad de corredores que asistieron se comparaba a la del Tour de Francia. Donald Trump era el patrocinador de esta carrera y tenía grandes expectativas de que llegara a ser muy grande.
Nunca he visto una carrera en América, esta es la primera carrera que he visto personalmente, aunque siempre sigo el Tour de Francia en televisión […] Yo no soy un ciclista, pero me volveré uno ahora. Estoy asombrado […] En dos años esperamos hacerla aún mejor que el Tour de Francia. Creo que tenemos una buena oportunidad de expandir la carrera», dijo Trump.
Después de dos años, el Tour de Trump dejó de existir. La carrera en sí vivió como el Tour de DuPont hasta 1996 (con no otro ganador que Lance Armstrong en las últimas dos ediciones). Pero, ¿qué fue lo que limitó la participación de Trump a solo dos años?
En 1989, la edición de la carrera fue ganada por el noruego Dag-Otto Lauritzen, pero no en circunstancias normales. Lauritzen tomó una confortable ventaja después del descanso en la segunda etapa. y después atacó en la cuarta etapa, tomando más ventaja en las 24 millas finales.
Salirse del patrocinio
Quizá la decisión de Trump de retirarse de patrocinar el Tour fue debido a la controversia al rededor de la carrera. Muchas escenas afuera de los recorridos que hacía el billonario por parte de anti-Trump, afectaron también la imagen del evento. Sin embargo, la decisión de retirarse del evento no fue del todo financiera.
La decisión inicial de Trump de financiar la carrera fue oportunista. A nadie le sorprendió después cuando volcó sus esfuerzos en invertir en numerosos casinos que estaban a punto de quebrar.
