
Zonas críticas de la bici que en mal estado pueden causarte problemas
Existen algunas zonas críticas de tu bicicleta, que deben revisarse con regularidad o incluso antes de cada rodada, recuerda que una inspección preventiva nos ayudará a anticipar daños mecánicos, a identificar un mal ajuste, a prevenir accidentes o resbalones y por supuesto a ahorrar dinero.
Para todos es claro, que una bici con los frenos dañados representan un peligro no solo para el conductor sino también para las personas que están cerca. Sin embargo, no es la única zona de la bicicleta que se considera vulnerable, pues existen algunas otras que en caso de fallar pueden poner en riesgo tu integridad. Por eso, en este post hemos preparado para ti algunos consejos para mantener a tope tu máquina en este mes que apenas comienza.
Realiza un buen mantenimiento a las diferentes zonas de tu bicicleta y alarga su vida útil

Asegúrate de realizar tus trayectos en una bici bien configurada, de seguir las normas de transito y evita los accidentes en la ruta ¡tu seguridad es lo más importante!. Imagen: Cerne Brasil.
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1. Los platos y la cadena
Primero debemos tener presente la revisión periódica de la cadena, porque al encontrarse desgastada puede ser la causante de daños en los platos, que de por sí no resultan para nada económicos.
También si la cadena se cae continuamente o se salta algunos dientes, es una clara señal de que el plato ya se encuentra desgastado, lo que representa un peligro para el ciclista que pueda dar un paso en falso y caer de la máquina de frente. Asimismo, no te olvides de lubricar la cadena y cuidarla del óxido.
2. Pastillas de freno
En los frenos de disco, el desgaste de las pastillas depende de factores como su uso, los terrenos por los cuales se transite o el calor que genera por la fricción. Es importante que revises, que no generen ningún ruido al conducir, que su superficie no se encuentre desgastada y que al accionar los frenos tu bicicleta se detenga casi que inmediatamente.
Recuerda que es una zona de tu bicicleta que nunca debes descuidar, pues un sistema que funcione de manera adecuada puede incluso salvar tu vida y prevenir un accidente.
3. Cableado
Es posible que el cableado de la máquina se mueva un poco y haga perder efectividad al frenar o el realizar cambios. Por eso, te recomendamos mover las superficies de las cubiertas y asegurarte de que se deslicen sin ningún tipo de fricción, pero si por el contrario no notas un movimiento fluido del cable puedes cambiar las fundas, de esta manera garantizas mayor sensibilidad en el sistema.
4. Cubiertas
Un ciclista que no está acostumbrado a revisar periódicamente el estado de las llantas, está expuesto a experimentar una desafortunada racha de pinchazos, a disminuir la capacidad de agarre en terrenos accidentados o a que su vida se vea comprometida.
Por lo anterior, debes estar atento a el desgaste de la banda de rodadura, al desgaste de las zonas laterales (en MTB), a la reducción considerable del líquido tubeless en caso de contar con ese sistema, al aplanamiento de la zona central (en RUTA) y a las grietas producto del desgaste en la superficie de rodadura.
Recomendaciones finales
Finalmente, te recomendamos revisar el estado del asiento, los pedales, la barra de la tija y la presión de las llantas, recuerda que si es muy alta, las llantas tienden a rebotar, y si les hace falta se tienden a desgastar y agrietar las paredes laterales, además suponen un riesgo alto de accidente.
Esperamos que esta entrada te haya sido de utilidad, no olvides que tu seguridad depende en gran parte de un buen equipamiento y de una máquina ajustada correctamente. No la lleves al límite, porque podrían haber sorpresas poco agradables.